En un mundo tan globalizado como el de hoy, donde la mayoría tiene acceso a internet, varios procesos que antes involucraban gran papeleo y mucho tiempo se han convertido en una diligencia que puede tomar tan solo unos minutos. Un ejemplo de esto son los créditos rápidos. ¿sabes algo acerca de ellos?
La verdad es que el auge que tienen los créditos rápidos y fáciles ahora es impresionante. Es la opción más viable para aquellas personas que quieren olvidarse de los procesos tediosos y necesitan ahorrar tiempo. Sin embargo; es importante conocer las ventajas y desventajas antes de solicitar uno.
Si a pesar de leer las ventajas y desventajas de un crédito rápido, aún no tienes claro si solicitar uno, incluso si estás en la necesidad de hacerlo, ¡no hay problema! Después de todo, tienes todo el derecho del mundo a tener dudas y Moneezy el deber de despejarlas.
Como has visto, las ventajas que ofrecen los créditos rápidos son muchas, pero varias veces resulta difícil dar el paso y hacer clic en el botón de “solicitar”. Por ello, aquí encontrarás algunos planteamientos que podrán quitarte todos los “peros” y te brindarán información adicional de utilidad.
Lo primero, es saber exactamente cómo funciona eso que quieres ¿o no? Pues bien, un crédito rápido es un monto de dinero que se pone a disposición del usuario para que este pueda utilizarlo como quiera y las veces que lo necesite.
Por ejemplo, imagina que necesitas urgentemente un monto de 600€ porque se te ha dañado el aire acondicionado del coche y quieres repararlo cuanto antes para no derretirte durante el verano. Ágilmente y sin perder ni un segundo te diriges a Moneezy para solicitar un crédito rápido que te permita tener esa cantidad sin papeleos, avales o tediosos requisitos. Luego, al ver la factura con el monto de la reparación, resulta que fueron 350€ ¡un poco más de la mitad de lo que tenías previsto! Entonces, sin utilizar dinero de tus ahorros procedes a cubrir ese gasto con tu crédito rápido. Al final, según la fecha acordada con la entidad, tendrás que pagar solo el monto que hayas utilizado (los 350€) y al siguiente mes, puede que la cantidad esté nuevamente disponible para que la utilices cuando desees. También, puede haber meses donde no la utilices e igualmente estará a tu disposición. Entonces, un crédito rápido puede utilizarse a través de una cuenta bancaria o con una tarjeta de crédito para que puedas resolver problemas económicos en el momento sin desequilibrar tu presupuesto ni tus ahorros.
La verdad es que sí. La concesión de un crédito rápido es bastante rápida. La mayoría de las entidades tienen un rango de tiempo de 15-20 minutos para que puedas ver el dinero disponible en tu cuenta. Esto, por supuesto, dependerá de la entidad, del tipo de banco al que te transfieran el dinero y el horario de apertura. Pero en líneas generales, ¡podrás ver el dinero de tu crédito rápido en menos de lo que imaginas!
Al igual que los préstamos, los créditos rápidos tienen intereses de acuerdo con la cantidad solicitada y deben devolverse a la entidad que los haya puesto a disposición del solicitante. El plazo de pago y el monto serán los que dicten la cantidad de intereses a pagar. Esto podría considerarse como el costo de tu crédito rápido.
Si el monto que deseas solicitar se encuentra entre 900€ y 1.000€ es importante que evalúes la posibilidad de un crédito tradicional en lugar de un crédito rápido, ya que, como se ha mencionado arriba, los intereses de los créditos rápidos suelen ser un poco más altos debido a los pocos requisitos y la facilidad de concesión. Sin embargo; cada caso es distinto, depende de cada persona y de las condiciones que ofrezca el proveedor. Pero si surge algún improvisto que puedas solventar con un crédito rápido, no tengas miedo en solicitarlo; ya que muchas veces pagar un poco más en intereses valdrá más que tener un desequilibrio financiero y no poder manejarlo a tiempo.
Por otro lado, muchas veces es posible conseguir créditos rápidos sin intereses. Bien sea porque la entidad así lo ofrece o por fidelidad del cliente con la entidad, ¡ahí te va un punto positivo!
El mundo está cambiando constantemente, lo que lo hace ser cada día más competitivo, ¡Pues las entidades financieras y proveedores no se quedan atrás! Con todos los avances tecnológicos que se ven a diario han surgido más y más entidades dispuestas a satisfacer tus necesidades económicas. Con esto, por supuesto que la competitividad por ofrecer el crédito rápido con las mejores condiciones es el “pan de cada día”. Lo bueno de esto es que tienes la oportunidad de elegir la entidad o proveedor que te guste más, e incluso, ¡la probabilidad de encontrar un crédito rápido sin intereses ni vinculaciones o compromisos adicionales es MUCHO MAYOR!
Seguramente esta es la parte que aterroriza más a los usuarios, ¡sin contar con el pago de los intereses! La verdad es que no debes agobiarte al escuchar la palabra “requisitos” porque en el caso de los créditos rápidos son tan sencillos como ordenar tu comida favorita y esperar a que llegue a la puerta de tu casa. Sin embargo; algo que siempre debes tener en cuenta es la entidad que elijas para tramitar tu crédito rápido, ya que todas son distintas y, por ende, ofrecen condiciones distintas. Si quieres saber más acerca de los requisitos y condiciones específicas de cada entidad, puedes echar un vistazo aquí.
Por otro lado, es importante que sepas que, en la mayoría de los casos, al ofrecer un crédito rápido las entidades financieras piden a sus usuarios lo siguiente:
Este punto va más allá de ser un consejo, es LO BÁSICO para tomar no solo la decisión de solicitar un crédito rápido, sino cualquier otra. La importancia de conocer tus límites es fundamental para que todo salga bien, ¡Sí, todo! No puedes permitirte solicitar un crédito rápido de un monto que luego no sepas cómo devolver. Esto solo te traerá más problemas financieros. Y sí, seguramente piensas en que a veces las circunstancias impiden que pienses con claridad, pero créeme que sacar un par de cuentas con visión al futuro y considerando tu capacidad de pago serán más que suficientes para ahorrarte dolores de cabeza intensos. Así que ya sabes, sin importar la cantidad que sea, ni la situación en la que te encuentres, intenta siempre tener en cuenta cómo podrás devolver el monto solicitado sin inconvenientes.
¿Te has asustado? Respira profundo… es inevitable cometer errores, por lo que atrasarte con el pago de tu crédito rápido es una posibilidad que no puedes descartar, ¡pero aquí te traigo otro punto positivo! Ahora mismo, la mayoría de las entidades ofrecen algún tipo de seguro, oportunidad de pagar una compensación y hasta préstamos que permiten reunificar y organizar las deudas para ayudar a los usuarios a completar el pago de su crédito rápido de la mejor manera. Así que, si bien no es la situación ideal, ya sabes que tu vida no acabará en una espiral de deudas solo porque te has atrasado con el pago de tu crédito ¡Siempre habrá soluciones!
Como seguramente has notado, son muchas más las ventajas que las desventajas cuando hablamos de los créditos rápidos, así que, si estás pensando en solicitar uno, espero que esto pueda ayudarte a aclarar tu panorama. Todos deberían conocer sus opciones de financiación, ya que alguna vez hemos estado en una situación en la que necesitamos dinero que no tenemos en ese momento. No debe haber ningún sentimiento de vergüenza o tristeza detrás de ello, porque en realidad, las soluciones abundan y un crédito puede ser la que necesitas ¡Más aún cuando solicitar es gratis y sin compromisos!
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